Collage del último librito que leí:
El mal de la muerte, de Marguerite Duras
Le pregunta cómo lo sabe. Ella dice que lo sabe. Dice que se sabe sin saber cómo se sabe.
Usted le pregunta: ¿En qué el mal de la muerte es mortal? Ella responde: En que el que lo padece no sabe que es portador de ella, de la muerte. También en que estaría muerto sin vida previa a la que morir, sin conocimiento alguno de morir a vida alguna. […]
Usted pregunta cómo podría surgir el sentimiento de amar. Ella le responde: Quizás de un fallo repentino en la lógica del universo. Dice: Por ejemplo de un error. Dice: Nunca por quererlo. Usted pregunta: ¿El sentimiento de amar podría surgir de otras cosas aún? Usted le suplica que diga. Ella dice: De todo, de un vuelo de pájaro nocturno, de un sueño, del sueño de un sueño, de la cercanía de la muerte, de una palabra, de un crimen, de uno, de uno mismo, de pronto sin saber cómo. [..]
Con todo, así pudo usted vivir este amor de la única forma posible para usted, perdiéndolo antes de que se diera.
Si de los sueños, o de los sueños de los sueños, puede surgir el sentimiento de amar, de mi "sueño recurrente" surge un amor recurrente, y mi forma de vivir este amor, es soñando.
ResponderEliminarPerdón, me olvidaba: de lo que si estoy segura, es que del insomnio no surgen más que dudas, es mejor amar un sueño, que dudar del amor. Creo yo.
ResponderEliminarUy amiga.. que bolonqui este tema..
ResponderEliminarDifiero con (o de?) vos.. o más bien tengo la esperanza de que el amor también pueda surgir de un insomnio, del insomnio de un insomnio, de un insomnio recurrente..
Eso si, hasta ahora dude del amor y amé varios sueños!